dissabte, 13 d’octubre del 2007

Decir amigo

Si los recursos son limitados, donde recursos igual a amor, mi historial emocional no me ha tenido que funcionar necesariamente porque me he dedicado más a mis amigos que a mis parejas.

Y si uno de mis amigos más preciados me hubiese querido cada día de nuestra vida en común excepto uno (y además tuviera la osadía de verbalizarlo) yo no podría más que hacer cosas para que me quisiera más al día siguiente y la estadística hiciera el resto (el día de amor cero quedaría entonces compensado).

Es posible que sea la persona a quién más veces he citado. Una vez incluso dejé a un chico utilizando una metáfora que él mismo había creado para la ocasión. He intentado, sin éxito, que los malos momentos de mi vida me reconfortaran y me aportaran (lo que en teoría no es poco) lo grandioso de sentirse vivo solo porque así resuelve él sus malos momentos.

Nunca ha sentido compasión por mí. Nunca ha creído que debiera preocuparme mi vida y, en ocasiones, no me han preocupado determinadas situaciones porque he sabido levantarlas a través de la fuerza que él creyó que yo tenía (la tuviese o no).

A veces pienso que es demasiado joven para ser tan sabio.

Tiene de un niño la ternura y de un poeta la locura, y aún cree en el amor.

Y yo creo en él.

5 comentaris:

Motenai ha dit...

No era necesario, pero muy bonito nevertheless.

Me has dado rabia, pero nunca he dejado de quererte :-P

Nunca olvides que te admiro, aunque me niegues tres o mil veces.

Gemma ha dit...

Ya sé que estás llorando de emoción pero te contienes porque te están mirando...

Motenai ha dit...

Pero solo tú eres capaz de mirar en mi interior. Nunca olvidaré aquella mañana de Ikea en la que fuimos novios.

Vander ha dit...

Madre mía, qué empacho de azúcar XD

Anònim ha dit...

Mira qué rabiosillo se pone Vander :-p