Y qué me gustan, a mí, estas cosas. En estant ahir a la Barceloneta, vaig poder afegir l'última joia de la colecció.

Aquí, uns exemples:
Mandar al carajo: originariamente un castigo, que consistía en mandar a los marineros que no cumplían con sus quehaceres a la parte más alta del mástil del barco, a una especie de cesta (el carajo), donde se pasaban tres días mareaos perdidos hasta que recapacitaran. (Fuente: señora hondureña en playa).
Irse de picos pardos: se remonta a aquel tiempo en que las prostitutas llevaban discretos pedazos de tela color marrón, de forma triangular, colgando de sus ropajes habituales, para ser reconocidas únicamente por los que tuvieran a bien reclamar sus servicios. (Fuente: no me acuerdo, vaya por Dios).
Estar en Babia: se dice que un rey en la Edad Media tenía una de sus residencias de verano en Babia (León), donde se retiraba para pasar temporadas de descanso. Cuando en la Corte preguntaban: "¿dónde está el rey?" y se les respondía: "el rey está en Babia", era señal que el monarca se encontraba en uno de sus recesos, en total estado de abstracción y, por tanto, no debía ser molestado. (Fuente: Arantxa, mítica camarada en Hard Rock).
Que no te las den con queso: hablamos aquí de timo, concretamente de catas de vino malo y barato vendido a precio de gran reserva. Para ello, nada mejor que ofrecer un buen queso de sabor fuerte para neutralizar el del caldo. No os dejeis engañar. (Fuente: Glòria, o al menos ella estaba presente cuando nos lo contó nosequién).
¡A buenas horas, mangas verdes! No es que yo lleve siempre camisetas verdes (podría darse, esta expresión probablemente es de las que más veces he tenido que escuchar referida a mi persona). Quienes llevaban casacas verdes eran los policías urbanos allá por el siglo XIX, una de las características de los cuales no era precisamente la puntualidad. (Fuente: Montse García, nuestra profe de Lite en 3º de BUP).
Estar entre Pinto y Valdemoro: mi favorito, por haberlo podido experimentar por mí misma en una de las escapadas (els podem dir
chupinades?) a Madrid amb les Chupis, el dia que vam agafar un rodalies direcció Toledo. Dos paradas de tren seguidas: Pinto... y Valdemoro. ¿Qué hay en el medio? La más absoluta nada (la meseta). Muy revelador. (
Fuente: experimentado en primera persona).
Irse por los cerros de Úbeda: en su origen, cuando uno de los capitanes del Ejército se escapó antes de entrar en combate y reapareció al final, alegando que se había perdido por los cerros, su significado era de cobardía. Actualmente le damos otro uso, como también damos otro uso a la palabra
enervar. (
Fuente: Montse García, la misma profe, The One).
Estar en la luna de Valencia: de cuando Valencia era una ciudad fortificada y existía toque de queda. Quienes llegaban más allá de ese límite, se quedaban a las puertas de la ciudad sin más que hacer que observar su luna. (Fuente: JordiDeValència, o Chordi).
Y dicho esto, me vuelvo a la playa, mi nuevo Templo del Saber, abierto al mar.