No pueden serlo. Son una versión mejorada de lo humano, donde el espectáculo trasciende su función primera de entretener al público. En este caso, en cambio, la audiencia da las gracias a tremendos freak of nature-s por exhibir su superioridad ante simples mortales que amb prou feines sabrán imitar la vuelta a dos pies de Bisbal.
Esto no se consigue tras años de ensayo. No dedicándose en cuerpo y alma a la causa. No, no se puede. No puede poderse. Son gente gifted, y digo gente porque tienen forma humana aunque, como he dicho, no lo sean.
Abren con un trailer en vivo de lo que vendrá a continuación, donde trapecistas, faquires, contorsionistas y demás saltimbanquis titiritean simultáneamente en una coordinación perfecta de movimientos con Música (también en mayúsculas).
Lo que le sigue es puro Arte.
Es la sofisticación del circo, le cirque. No podían denominarse en otro idioma, dado el buen gusto estético y la pasarela de haute couture con que nos deleitaron durante dos (cortas) horas. Ni siquiera, como acostumbra a pasarme, hubo un efecto aspiracional en mí del "quiero ser uno de ellos". No podría, como he dicho, dado que sangro, siento, padezco y algún día moriré (=> soy humana). Debo, pues, limitarme a dar las gracias porque ellos existan y sólo haya que pagar por verlos.
No obstante, el resumen argumental que pretende el título de la función no es exactamente el mensaje que transmiten, con lo que yo lo hubiera llamado de otra forma. Aunque me parece un título armónico para un espectáculo, resulta demasiado humilde.
Al catalitzador de tot plegat (aunque no vayas a leerlo): m'has regalat una altra Alegría. Gràcies.
12 comentaris:
Sí, yo lo vi en su momento y también me encantó.
Es demasiado caro, para mí, en comparación con lo que ofrece y no deja de ser un circo de toda la vida pero con más glam.
Y no tiene trapecistas :-(
He visto todos los espectáculos que han traido a Barcelona, Alegria es la canción principal de la BSO de nuestra boda, pero a pesar de ello, si digo que estoy de acuerdo con Sergi en su segundo párrafo, se me considerará un troll?
Le Cirque du SOleil dotó de sofisticación un mundo que parecía destinado a extinguirse, y no tuvo que ser difícil, partiendo de lo cutre y casposo que es el circo tradicional. Pero la realidad es que no hacen nada que no hicieran los demás con menos lentejuelas y plumas. No son mejores artistas, ni están más capacitados, ni han inventado nada, o mejor dicho, sí han inventado algo, se han reinventado a ellos mismos, pero eso es mérito del Marketing, no de la flexibilidad o el equilibrio.
Mote, a juzgar por tus dos puntos guión paréntesis que abre intuyo que en el Alegría de hace 8 años no hubo trapecistas. Lo siento.
Marta, parteixo de que el Marketing també és un art.
Y otra cosa:
Usan todo cables! Yo me acuerdo de ir al circo de pequeño y escuchar: "Y más difícil todavía: SIN RED!"
Igual era más casposo, pero tenía ese factor riesgo que hoy se ha convertido en el factor habilidoso ( que también existía antes) y una presentación que, eso sí, supera a la de aquel mítico speaker xD
A mi me siguen encantando, claro. Pero a qué niño no le gusta el circo?
No puc estar més d'acord, al fin y al cabo es de lo que vivo, pero quizás después de pagar por 4 espectáculos diferentes, la próxima vez daría gustosa los 100€ de rigor por sentarme frente a los creadores reales de Le Cirque, aunque fuera en un despacho soso alejado del glam del Gran Chapiteau en el que las Converse y los jeans sustituyeran a las máscaras y los tocados.
Pues muy mal xD
Oye, si lo haces para ganar visitas a tu blog...
Y no borres comentarios, que mis respuestas se quedan sin sentido!! :-(
A mí no me gustaba el circo. Lo asociaba a ruido y a cosas que me daban miedo. Los tigres = miedo; los leones = miedo; los payasos = miedo, mucho miedo.
Es la debilidad que tengo por lo bello, ante todo soy hedonista y me rindo ante lo bello. Aclaración para Mote, viéndolo lo venir: por una parte, soy hedonista y, por otra, adoro lo bello.
Coño, lo he borrado porque de repente me ha saltado el de Marta delante y el que dejaba de tener sentido era el mío!!
Ya, claro... seguro que esa es tu única forma de tener razón... de repente hemos retrocedido 50 años...
Gemma, totalment d'acord. Fantàstic, tot i que Dralion em va agradar mil vegades més que Alegria. Això sí, trobo que les entrades són una mica massa cares...
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